Baptist Press - Tennessee, EE.UU. - Los hombres que regularmente asisten a servicios religiosos tienen más probabilidades de tener matrimonios estables y felices, más probabilidades de estar involucrados con sus hijos y menos probabilidades de divorcio, dicen nuevas investigaciones.
Además, las madres que asisten semanalmente a la iglesia tienen la mitad de posibilidades de tener hijos fuera del matrimonio, dice el estudio.
La investigación realizada por W. Bradford Wilcox de la Universidad de Virginia analizó información de tres diferentes encuestas: la General Social Survey, la National Survey of Families and Households, y la National Survey of Family Growth. La investigación también obtuvo información parcial del libro de Wilcox: “Soft Patriarchs, New Men: How Christianity Shapes Fathers and Husbands.” (Patriarcas Suaves, Nuevos Hombres: Cómo el Cristianismo Forma Padres y Esposos)
“Los hombres religiosos (y sus esposas) disfrutan de matrimonios más felices, tienen menos probabilidad de tener hijos fuera del matrimonio, y tienen más probabilidad de tener un acercamiento padre-hijo más activo y afectivo durante la crianza de los hijos, en comparación con los hombres nominalmente religiosos o seculares,” escribió Wilcox. “Por lo tanto, cualquier esfuerzo por fortalecer los lazos del hombre con sus hijos y familia debe reconocer e incorporar el importante papel que juegan las instituciones religiosas en dirigir el corazón del hombre hacia el hogar.”
La investigación - titulada “¿Es la Religión una Respuesta? Matrimonio, Paternidad y la Problemática Masculina” - se publicó en junio en el sitio web del Centro para Matrimonios y Familias. Fue comisionada por la Iniciativa Nacional de Paternidad.
El artículo de la investigación hizo notar que durante los 50 años pasados un gran número de hombres se ha desconectado de la vida de la familia. El “porcentaje de hijos que viven en hogares en los que el padre está ausente subió de 11 por ciento en 1960 a 27 por ciento en 2000,” decía el artículo. Además, 38.5 por ciento de los bebés en el 2006 nacieron fuera del matrimonio, estableció el artículo.
La ruptura del matrimonio, la revolución sexual, el declive real en los salarios y el surgimiento del individualismo han contribuido a distanciar al hombre de su familia, decía la investigación. La religión, sin embargo, puede jugar un papel para atraer a los hombres más cerca a su familia, dijo. La investigación encontró que:
- El 70 por ciento de los esposos “que asisten a la iglesia regularmente reportan que ’son muy felices en su matrimonio” en comparación con el “59 por ciento de los esposos que raramente o nunca asisten a la iglesia.”
- Entre 1988 y 1993, los hombres y mujeres que asistían a servicios religiosos algunas veces o más al mes “tenían aproximadamente 35 por ciento menos probabilidades de divorciarse en comparación con sus iguales que raramente asistían a servicios religiosos.”
- Los padres que asisten algunas veces o más al mes a la iglesia “dedican por lo menos dos horas a la semana más en actividades relacionadas con los jóvenes,” “tienen significativamente más probabilidad de involucrarse en actividades uno a uno con sus hijos de edad escolar” y “tienen por lo menos 65 por ciento más probabilidades de darles más frecuentemente elogios y abrazos a sus hijos” en comparación con los padres que no tienen ninguna afiliación religiosa.
- Las madres “que asisten a la iglesia una vez por semana o más tienen menos de la mitad de probabilidad de tener hijos fuera del matrimonio, en comparación con las madres que asisten a la iglesia mucho menos o nunca.”
“Este descubrimiento es importante debido a que los hombres, mujeres y niños que tienen la suficiente fortuna de vivir en familias centradas alrededor de la alta calidad de un matrimonio estable disfrutan una amplia gama de beneficios: mejor salud, mayor riqueza y más felicidad que sus iguales,” escribió Wilcox. “Por lo tanto, en la medida que este informe encuentra que la religión une a los esposos a sus esposas en matrimonios fuertes en los Estados Unidos, también sugiere que la religión indirectamente alberga el bienestar físico, económico y emocional de los adultos y los niños.”
¿Por qué la religión tiene tal impacto positivo en los padres y en la familias? El artículo citó cuatro razones. Las iglesias y las instituciones religiosas: 1) les enseñan responsabilidad moral a los padres; 2) les proveen a los padres oportunidades, como los grupos de jóvenes, para pasar tiempo con sus hijos y su familia; 3) ofrecen ánimo y consejo para que sean padres efectivos; y 4) proveen un “orden significativo” a la vida, por lo tanto ayudan a los padres a “lidiar constructivamente” con pruebas como el desempleo y la muerte.
La investigación también citó información que muestra que la cohabitación - esto es, parejas que viven juntas antes del matrimonio - no provee estabilidad.
“Los hombre que cohabitan en unión libre son menos propensos a quedarse y desarrollar lazos con sus hijos, debido a que las uniones libres tienen menos probabilidades de perdurar,” escribió Wilcox. “Un estudio encontró que un niño nacido de una unión libre tenía un 50 por ciento de riesgo de que sus padres se separaran en sus primeros cinco años de vida; por el contrario, un niño nacido de una pareja casada tenía solamente un 15 por ciento de riesgo de que sus padres se separaran en sus primeros cinco años.”